El tratamiento con láser de carbono activo potencia los efectos de la fototerapia IPL, actuando en profundidad sobre la piel. Este procedimiento ayuda a mejorar el aspecto del acné, reducir manchas, minimizar poros dilatados, equilibrar la producción de grasa y aportar una mayor luminosidad.
El carbón activo se aplica sobre la piel y actúa como un potente limpiador y regenerador, favoreciendo la eliminación de impurezas y estimulando la renovación celular.
Fototerapia con IPL carbono activo
El carbón activo se aplica sobre el rostro y actúa como un potente limpiador y detoxificante, absorbiendo impurezas, regulando el exceso de grasa y dejando la piel más lisa y uniforme. Posteriormente, la luz IPL potencia sus beneficios, estimulando la producción de colágeno y favoreciendo la renovación celular.
Para maximizar los resultados, incorporamos sueros específicos diseñados para trabajar en combinación con la fototerapia. Estos sueros refuerzan la acción del tratamiento, aportando hidratación, firmeza y vitalidad, logrando un acabado radiante desde la primera sesión.
Una experiencia estética avanzada, indolora y segura que transforma la piel desde el interior para que luzca su mejor versión.